CAMILA SALDRÁ ESTA NOCHE
Camila: una chica "progre"
Del nuevo film de Inés Barrionuevo se puede decir que está de moda. Atraviesa todos los temas y tendencias de actualidad: la temática LGTB, la diversidad sexual, la lucha contra el aborto y el empoderamiento femenino. Solo estuvo ausente el lenguaje inclusivo.
Camila es una joven platense liberal, de padres separados, que se muda a Buenos Aires con su madre y hermana para ocupar el amplio departamento de la abuela que está internada gravemente enferma. La madre no tiene mejor ocurrencia que anotarla en un colegio de tintes religiosos, cuando la adolescente se adaptaría mejor en una institución laica por sus ideales y personalidad. Como toda recién llegada y en un ambiente restrictivo, se siente incómoda para expresarse tal cual es, ajena al entorno.
De a poco comienza a urdir relaciones que le permitirán, por un lado, abrirse a su sexualidad, y por otro, a la directora, desplegar los roles actuales del hombre moderno: comprensivos, homosexuales, acosadores. Siempre firme en sus convicciones, nunca se echa atrás ante los desafíos (algunos agresivos), los enfrenta con la acostumbrada calma y tranquilidad que acompañan sus actos. Nunca una expresión intempestiva, jamás un gesto agresivo. El vínculo con su madre es una veta interesante bien explotada. Se encuentra desorientada frente a la conducta taciturna y esquiva de la hija, no encuentra el punto de equilibrio, no sabe cómo acercarse para establecer una cierta armonía en las relaciones. Carga con sus propios problemas a los que se suma insertar a las adolescentes en un ámbito completamente nuevo.
Barrionuevo utiliza un lenguaje cinematográfico contemplativo con buenos encuadres y actuaciones destacadas, en especial la de Carolina Rojas de gran fotogenia. Más cerca del final, un golpe de timón al guión le agrega interés al relato que parecía languidecer ante tanta abstracción.
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