top of page

38 Festival de cine de Mar del Plata

ELENA SABE


Con un clima desapacible (frío, viento y lluvia), escasos asistentes por la hora (9 de la mañana) y mucho entusiasmo comenzó una nueva edición del festival de Mar del Plata. El hecho de contar con menos salas, solo con las oficiales (Auditorium y Colón) y el complejo Aldrey, redujo la posibilidad de acceso al público, lo cual repercutió en la venta de entradas al agotarse los tickets de inmediato para muchas de las funciones. Luego de la ceremonia inaugural protocolar y muy politizada comenzó la verdadera muestra con la primera película de Competencia Internacional.



Muchas expectativas existían en torno de “Elena sabe”, tanto por la autora del libro, la exitosa escritora Claudia Piñeiro, como por la directora Anahí Berneri que se hace nuevamente presente luego de participar en el 2005 con “Un año sin amor”. Como es característico en las novelas de la creadora de “La viuda de los jueves”, una muerte, en este caso un suicidio, será el disparador para repasar la vida desde la adolescencia hasta la adultez de un vínculo tóxico entre una madre y su hija. Los personajes tienen más peso que el hecho delictivo que tiende a diluirse con el correr de los minutos para poner el foco en esa madre que no se daba cuenta que no solo alcanza el bienestar en la crianza de los hijos.



Elena (Mercedes Morán) de 65 años, con una variedad del mal de Parkinson, arrastra por la vida sus dolores físicos y emocionales. Rita (Erica Rivas) su hija de más de cuarenta se encuentra en una inversión de roles, ya que debe cuidar a la madre como si fuera su hija. Maestra, con un romance que lleva algún tiempo, pero nunca se concreta, vive sometida a los dictados de Elena, que, por decisión de ambas, no es internada en un geriátrico ni tiene una ayuda que la atienda cuando Rita se ausenta de la casa. La muerte de Rita genera una serie de flashbacks que reflejan una relación plena de choques, reparos y desencuentros entre las protagonistas que se acentúan con la enfermedad de Elena. En el tiempo presente la madre busca culpables en distintos frentes, recurre a la policía e incluso a una abogada para que la ayude para reabrir la causa. Una mujer ciega que no reconoce su participación implícita en el hecho, una manera muy particular de expiar los propios pecados.



Las actuaciones de Morán y Rivas, en el que el glamour quedó de lado, son un gran aporte para sobrellevar una historia densa que incomoda al espectador por el aspecto de las actrices que se caracteriza por la depresión y el desamparo. Por otro lado, la directora mantiene el rumbo de la narración que mantiene expectante al público hasta el final.



Comments


Si deseas contactarme,  escríbeme

Thanks for submitting!

© 2023 by Train of Thoughts. Proudly created with Wix.com

bottom of page